1º- En primer lugar tenemos que elegir de qué tamaño queremos hacer el calentador, es decir, el número de latas a lo ancho y alto del dispositivo, para poder así construir la caja de madera que las va a contener. Por ejemplo, en el dispositivo de la imagen, las medidas son:
·Ancho: el justo para que quepan 5 latas.
·Largo: el mismo que 10 latas unidas entre sí, más 5 centímetros extra para favorecer la salida del aire.
·Alto: un poco más que el de una lata en horizontal.
Los bordes interiores de la caja han de sellarse con silicona, para evitar escapes de aire y que la eficacia sea lo mayor posible.
2º- Las latas han de pintarse de negro, puesto que así absorberán mayor cantidad de energía solar, que es el fundamento de nuestro “artilugio”.
3º- A continuación hemos de hacer un agujero lateral para la entrada de aire frío a las 5 latas de la base, y un agujero inferior a las latas superiores, que se unirán con las que tengan encima mediante silicona para evitar pérdidas de aire de un lata a la siguiente. Cada hilera de latas ha de ir fijada al fondo de la caja para evitar holguras.
4º- La entrada de aire frío a las latas se consigue mediante un agujero que deberemos realizar en un borde de la caja. De forma similar, en la parte superior, realizaremos un agujero centrado, al que conectaremos un tubo, el cual conducirá el aire caliente a la habitación que deseemos.
5º- Por último se sella la caja encima de las latas con una lámina de plástico (por ejemplo polimetilmetacrilato), fijándola con silicona en los bordes de la caja.
Una vez acabo, podemos apoyarlo en una pared o fabricar una pequeña estructura donde quede fijado. Este calefactor casero es muy útil para zonas (o alguna habitación en concreto) frías, pero que tienen sol al menudo, para poder funcionar.
Para más información, consultar el sitio web http://desenchufados.net/